• A por la victoria

Para volver a Tokio, Keely Hodgkinson encontró su camino de regreso a casa

  • 16/9/2025

Cuando se le pregunta por la prueba que le demostró que estaba a la altura de las mejores runners de 800 metros del mundo, Keely Hodgkinson recuerda su victoria en el campeonatos británicos de 2021. Tenía 19 años, se consideraba a sí misma una atleta de segunda y se enfrentaba a algunas de las mejores runners de larga distancia de su país, muchas de cuyas carreras había seguido con admiración cuando era atleta amateur. A sus 23 años, la atleta de Nike ha alcanzado ese mismo estatus de heroína nacional. Actualmente posee el mejor tiempo mundial de 800 metros con 1:54.74, a pesar de un año marcado por las lesiones, y es una de las principales candidatas a la medalla de oro en Tokio.  

Keely se rodea de buenas personas en casa. Es difícil encontrar una nación más competitiva en los 800 metros femeninos que el Reino Unido. En 2024, de los cinco mejores tiempos femeninos de 800 metros, las runners británicas ocuparon tres, todos logrados en la misma carrera en el estadio olímpico de Londres en julio, cuando Keely estableció el récord británico. Su orgullo por ser de Mánchester inspira a Keely y se manifiesta incluso en su elección de club de entrenamiento, el M11. Con sede en Mánchester, se trata del más nuevo centro del Nike Swoosh TC, con integrantes como las atletas como Georgia Hunter Bell, Sarah Healy y Erin Wallace. Como comparte Keely a continuación, existe una gran fuerza en reconectar con los lugares que te formaron.


Crecer en un pueblo pequeño puede brindarte oportunidades importantes si tienes talento y ética de trabajo. Yo crecí en una comunidad muy pequeña cerca de Mánchester. Para mí, fue un entorno genuino donde crecer. En la escuela me apoyaban muchísimo. La gente que creía en mí me alentó a correr campo a través, y allí fue donde surgió mi amor por el deporte. No sé si alguien pensó que algún día llegaría a competir en el escenario mundial, pero cuando eres pequeña y la gente de una pequeña comunidad te conoce, se ofrecen oportunidades para descubrir una pasión que de otro modo quizás no habrías encontrado.

Cuando pienso a quién represento como runner, lo primero que me viene a la mente es mi ciudad natal. Estoy muy orgullosa de ser de Manchester. Mi ciudad es una de las más grandes del mundo. Y en lo referente al deporte, aquí somos increíbles. Tenemos dos de los mejores clubes de fútbol del mundo en la misma ciudad. Contamos con todo tipo de atletas de alto rendimiento que son de Manchester. Me encanta todo lo que me ha enseñado esta ciudad. Uno de nuestros lemas en M11 es que trabajamos como abejas, lo que refleja la ética laboral de nuestra ciudad.

"Me enorgullezco de ser de Manchester. Mi ciudad es una de las más grandes del mundo".

Keely Hodgkinson, atleta Nike, medalla de oro en los 800 m

Quedar la primera es fabuloso, pero hay que estar pendiente de esas pequeñas victorias que nadie más ve. Al recordar el año pasado, tenía varios objetivos: ganar el campeonato del mundo en pista cubierta, ganar el europeo y mantenerme invicta. Pero ninguna de esas metas se cumplió, debido a que continuaban mis problemas por la lesión de isquiotibiales. De repente, tuve que marcarme otros objetivos menores. Ponerme las zapatillas. Empezar a correr. Coger el ritmo a los 1500 m. Después a los 800 m. Esas pequeñas victorias significaban muchísimo para mí. No era el lugar en el que quería estar, pero a veces hay que dar un paso atrás y valorar las pequeñas victorias para alcanzar las grandes. 

Tus entrenadores pueden aportar perspectiva cuando se presentan dificultades. Y ese año tuve muchos momentos de frustración debido a las lesiones. El coach Trevor [Painter] y la coach Jenny [Meadows] destacan por muchas cualidades, entre ellas el gran apoyo que me brindaron. Tenemos una relación de confianza que nos permite mantener conversaciones sinceras. Ese año fue un desafío entender lo que me ocurría con las lesiones, especialmente tras un año de oro en París, pero creyeron en mí al 100 %. Ninguno entró en pánico. Y yo me preguntaba, ¿no sería momento de entrar en pánico? Pero tienen plena confianza en mis capacidades, mi talento y mi motivación. Saben que si me esfuerzo al máximo, no hay nada de qué preocuparse. 

La dinámica entre nosotras en M11 es muy sólida. Todas nos llevamos muy bien, nos apoyamos mutuamente, tenemos mucha ambición y competimos para sacar lo mejor de cada una. Al recuperarme de una lesión, resulta muy valioso tener a Georgia como punto de referencia; ha destacado enormemente en la pista. Todas aprovechamos las fortalezas y debilidades de cada una en las distintas sesiones de entrenamiento. Este año se han unido a nuestro equipo algunos chicos, y creo que se están apoyando en nosotras, las chicas, porque tenemos mucha experiencia y hemos competido a nivel mundial. No hay un grupo mejor de personas con quienes entrenar en la pista todos los días. 

"La dinámica entre nosotras en M11 es muy sólida. Todas nos llevamos muy bien, nos apoyamos mutuamente, tenemos mucha ambición y competimos para sacar lo mejor de cada una".

Keely Hodgkinson, atleta Nike, medalla de oro en los 800 m

Algunas carreras tienen el potencial de generar tiempos especiales. La de 2024 en Londres, donde establecí el récord nacional, fue una de ellas. Competir en un estadio olímpio es un sueño. Cada runner, independientemente de su nacionalidad, disfruta de ese público, ya que puede aprovechar la energía y el ambiente para llegar a la recta de meta. Y yo sabía que estaba en la mejor forma. Esa era la oportunidad de darlo todo frente a un público local. Y conseguimos el podio completo para Reino Unido. Georgia corrió una carrera increíble, y Erin nos ayudó a lograrlo como nuestra liebre. Recuerdo esa carrera con gran orgullo, tanto a nivel personal como nacional. 

Hubo momentos en los que ni siquiera creía que llegaría allí para competir por una medalla. Fue una lucha muy dura. Aunque volviera a competir, pensaba que no dispondría de tiempo suficiente para estar lista. Por eso valoro enormemente todo el proceso vivido. Para mí sería muy especial lograr una victoria en el mismo estadio de Tokio donde mi carrera despegó hace cuatro años. Pensar que aún estoy luchando por esas medallas cuatro años después es una locura. Eso demuestra el gran equipo que tenemos en casa.

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