Nuestra cadena de valor incluye la producción, la fabricación y el acabado de los materiales, así como la fabricación de los productos finales. Esta representa una gran parte de nuestra huella de carbono. Estamos trabajando con las fábricas para aumentar la eficiencia de sus centros, por ejemplo, aumentando el uso de energías renovables dentro y fuera de sus instalaciones, y hemos eliminado el carbón de los proveedores de nivel 2. También ayudamos a que nuestros proveedores se marquen objetivos climáticos más ambiciosos a través del programa Supplier Climate Action Program (SCAP), mediante el cual les proporcionamos herramientas para evaluar y mitigar riesgos climáticos, e identificamos oportunidades estratégicas motivadas por la transición hacia una economía hipocarbónica.