
Más allá de la bocina: cómo Nike impulsa a la próxima era de basquetbolistas de elite
- 11/9/2025
Texto e imágenes: Curtis Rowser
Estamos a finales de julio, pero en el sur de Estados Unidos el verano recién empieza a calentar. Jóvenes basquetbolistas sueñan con este momento, y para los más elite del país, ya regresó el evento anual. En Augusta, Carolina del Sur, el Riverview Park Activities Center rebosa con las leyendas de la realeza del básquetbol. Decenas de scouts de la NBA están dispersos por todo el gimnasio, entrenadores como John Calipari, Tom Izzo y Dan Hurley adornan las líneas laterales y miles de espectadores más llenan el lugar al máximo. Todos están aquí por el mismo motivo: ver al próximo plantel de estrellas definir el futuro del juego. Esto es Peach Jam, una joya de la corona del básquetbol de base y la cúspide del circuito Elite Youth Basketball League (EYBL) de Nike: un desafío veraniego que reúne a los mejores prospectos del país, armándolos con competencias, exposición y recursos que ninguna otra plataforma puede igualar.

Bradley Beal Elite, liderado por JaShawn "JJ" Andrews, un recluta cinco estrellas comprometido con Arkansas, asegura su lugar en las semifinales de Peach Jam. BBE ganaría el campeonato y Andrews sería coronado MVP.
Peach Jam también es una pieza importante en un ecosistema más amplio que Nike ha diseñado cuidadosamente durante las últimas décadas. El Swoosh tiene la misión de hacer crecer el básquetbol, y eso va mucho más allá de coronar a jóvenes campeones en julio y agosto. Perseguir campeonatos es un componente esencial para cualquier marca deportiva, pero más importante para Nike es el compromiso constante de brindar a los jóvenes basquetbolistas de elite el escenario, la comunidad y las herramientas para escribir el futuro del juego en tiempo real.

De no estar clasificado a indiscutible recluta cinco estrellas en menos de un año, Christian Collins celebra tras liderar al equipo Why Not en una contundente victoria sobre el equipo CP3 en los cuartos de final de Peach Jam.
Ese compromiso choca con un cultura del básquetbol que, al parecer, cambia todos los días de muchísimas maneras. Antes solo las superestrellas como Kevin Durant, LeBron James, A’Ja Wilson y Sabrina Ionescu inspiraban a la siguiente generación de basquetbolistas. Hoy en día,con solo un vistazo en Instagram o TikTok, videos virales destacados de gimnasios de preparatoria abarrotados llegan a salas en todo el mundo. Los jóvenes discuten, por ejemplo, sobre Tyran Stokes y Brandon McCoy, los mejores prospectos de las preparatorias, con tanto entusiasmo como la generación anterior a la suya discutía sobre Russ y CP3. Los fenómenos de las preparatorias, e incluso los prodigios de secundaria, están entrando en la conversación cultural y se convierten en nombres familiares antes que nunca. El estrellato ya no es una meta, es un punto de partida.
"Tenemos una musa en particular en la que nos enfocamos: la estrella, lo mejor de lo mejor, el top 1% del 1%".
Karie Conner, vicepresidenta y gerente general, Básquetbol y Kobe
La estrategia del básquetbol de base de Nike empieza con la identificación temprana de estos atletas de elite y continúa con brindarles los recursos de primer nivel que mantienen a Nike sin competencia. “Tenemos una musa en particular en la que nos enfocamos: la estrella, lo mejor de lo mejor, el top 1% del 1%”, señala Karie Conner, vicepresidenta y gerente general de Básquetbol y Kobe. "A través de todo nuestro conocimiento e investigación, nos hemos dado cuenta de que ellos son quienes realmente inspiran a quienes aman el juego a ser parte de él y a sumergirse por completo en él".

Un gimnasio abarrotado, Baltimore contra Nueva York, y un partido en el que hay que ganar o irse a casa: un tiro libre se abre paso entre el ruido en Peach Jam, en donde los basquetbolistas de elite más jóvenes del país persiguen un legado, sin excusas.
Ese conocimiento surge de un enfoque preciso que permite a Nike profundizar en las necesidades de los atletas, comenta Conner. "No solo se trata del producto y el equipo: se trata de satisfacer sus necesidades, proporcionarles las plataformas, asociarnos con ellos".
En Peach Jam, esa plataforma destaca claramente. Se puede ver a la estrella de los LA Clippers, Bradley Beal, celebrando con su equipo Bradley Beal Elite después de haberlos ayudado a ganar su primer campeonato en la historia del programa. Fueron liderados por una actuación digna de MVP de JJ Andrews,un recluta cinco estrellas comprometido con Arkansas, que ahora grabó su nombre junto a Jayson Tatum, Cade Cunningham, AJ Dybantsa y otras grandes figuras que han forjado su legado en el escenario de pruebas más exigente del juego. BBE pasó toda la semana sin su plantilla completa, a veces con solo seis jugadores disponibles. Pero cada minuto, cada posesión, el equipo estuvo al nivel del mantra escrito en las pancartas que cuelgan alrededor del gimnasio: No hay excusas. Solo pancartas. En efecto, esta semana en Augusta quedará grabada en la historia.

La futura jugadora de los Ohio State Buckeyes, Atlee Vanesco, salta en Victory Park, anotando un triple perfecto con el horizonte de la ciudad de Nueva York de fondo.
Después de Peach Jam, la cantera de básquetbol de Nike se dirige al norte, en donde los espera otro campo de batalla: Victory Park en la ciudad de Nueva York, sede de la final de NY vs. NY.
Es mediados de agosto y el verano está en su todo su esplendor. Los principales prospectos de la ciudad de Nueva York, chicos y chicas, han representado a sus distritos en un torneo veraniego que se desarrolla en algunas de las canchas más icónicas del juego: West 4th, Dyckman, Rucker Park. Mientras que Peach Jam, y el circuito EYBL en general, está pulido y meticulosamente organizado, NY vs. NY late con una energía cruda, sin filtros y poco refinada. Esto es intencional y es otra vía para impulsar la misión de Nike. "No nos podemos olvidar de las comunidades", enfatiza Conner. "Tenemos que asegurarnos de construir este tejido conectivo para que no tengamos nada aislado o desconectado".
Esta es la séptima temporada que Nike organiza NY vs. NY y cada vez es más grande. A lo largo del verano, superestrellas de la NBA como Luka Dončić, Ja Morant y Jalen Brunson se han acercado a los partidos. Lo que está en juego es distinto a lo del periodo activo de reclutamiento, pero eso no significa que sea menos importante. NY vs. NY es más personal. Aquí, los jugadores cargan con el peso del orgullo del barrio. Y nunca se les olvida que fueron seleccionados cuidadosamente para representar el Swoosh. "Que Nike te tenga en la mira es una verdadera bendición", comenta antes del campeonato NY vs. NY. Jermel Thomas, base de cuatro estrellas de Dyckman y comprometido con la Universidad Saint Louis. "Ves a los principales jugadores de la NBA con Nike: Kevin Durant, Giannis. Ser parte de eso y ver que me demuestran cariño, no puedes pedir nada más".
Jermel representa al Bronx con orgullo y es uno de los jugadores más prometedores del país, de ahí su apodo "Magic Mel". Es la personificación del "basquetbolista de elite" que menciona Karie Conner. Mientras recorre Victory Park, los chicos observan cada uno de sus movimientos. Su característico corte de pelo hi-top fade y sus 1.90 metros no pasan desapercibidos. En las semifinales contra el equipo Gersh de Brooklyn, con más de un millar de fans sentados codo a codo alrededor de la cancha y otros espectadores desbordándose hacia el nivel superior afuera del parque, Magic Mel ofreció un verdadero espectáculo, llevando a su equipo Dyckman a una victoria de dos puntos y asegurando un lugar en el campeonato.
Por desgracia, el último partido no fue su noche. Jermel y compañía se quedaron cortos en la pelea por el campeonato. Está molesto, pero todavía camina con la cabeza en alto, la confianza inalterada, pareciendo entender que las victorias y derrotas son solo el telón de fondo de un panorama mucho más grande.

Aquí, los jugadores cargan con el peso del orgullo del barrio. Y nunca se les olvida que fueron seleccionados cuidadosamente para representar el Swoosh.
Mientras tanto, las chicas en West 4th celebran haber ganado el campeonato. El equipo fue liderado por su MVP, Jordyn Jackson,recluta cinco estrellas comprometida con Maryland. La nativa de Washington D.C. es una de las pocas jugadoras que no son de la ciudad de Nueva York a las que Nike invitó a participar en NY. vs. NY. Y no vino para pasar desapercibida. Jordyn se lleva gran parte de la atención y con toda razón. La forma en la que se comporta, en que el balón encuentra sus manos, en que la confianza de sus compañeras de equipo aumenta un poco cuando está en la cancha. Es evidente que Jordyn está hecha para esto.
Su compañera de equipo, Ava Thomas, no duda en recordarte que los atletas de Nike no son un monolito. Ava es una de las mejores bases en la ciudad de Nueva York, con instinto asesino propio, solo que con un enfoque totalmente diferente. "Muchas personas se enfocan en anotar, y eso es importante", comenta, "pero enfocarse en los pequeños detalles, jugar a la defensiva, hablar con tus compañeras de equipo, aportar energía, eso también es muy importante. Y, obviamente, ser una gran estudiante fuera de la cancha".
"A los 17 años, se siente increíble ver que tu esfuerzo puede rendir frutos. Me he esforzado mucho y ser reconocida por Nike a esta edad es algo muy especial".
Ava Thomas, atleta Nike EYBL
Ava fue reconocida recientemente por la Fundación Naismith como una de las mejores estudiantes-atletas del país. Y gracias en parte a su participación en el circuito de verano de Nike, ya se comprometió con la Universidad Quinnipiac, después de recibir ofertas de Dartmouth, Lafayette y American, entre otras. "A los 17 años, se siente increíble ver que tu esfuerzo puede rendir frutos. Me he esforzado mucho y ser reconocida por Nike a esta edad es algo muy especial", comenta.
Aunque para Ava, ser reconocida por Nike como una figura destacada entre sus compañeras es más que un sello de aprobación. Es una constante en su recorrido. Su primer recuerdo vívido de Nike está ligado a uno de los días más desoladores del básquetbol. El mismo día en que el mundo perdió a Kobe Bryant, Ava se puso sus primeros Kobe. Lo que debería haber sido un momento de alegría, se convirtió en algo más profundo y pesado: un recordatorio de cómo la grandeza puede inspirar incluso en la ausencia.

"Lo que sea necesario", es la promesa que el basquetbolista JJ Andrews se repite a sí mismo. Todo el verano ha cumplido esa promesa.
Lo que nos lleva a Los Ángeles.
Unas semanas después de NY vs. NY, el legado de Kobe está en plena exhibición en el Mamba League Invitational, en donde Nike ha improvisado una notable cancha de básquetbol al aire libre en LA Live, justo enfrente del Crypto Arena. Por tercer año consecutivo, la marca ha invitado a los mejores jóvenes del país para que le muestren al mundo por qué serán los próximos basquetbolistas que inspirarán al mundo como lo hace Kobe.
Los chicos llegan a L.A. bajo un sol brillante con una temperatura que ronda los 30 grados. La cancha está abarrotada con fans de todas las edades y perfiles. Vanessa Bryant y Rob Pelinka están sentados junto a la cancha, con las miradas clavadas en el talento que continúa con el legado de Mamba.

La próxima frontera en el básquetbol es la rama femenil y Nike lidera la iniciativa para invertir, fortalecer y expandirla.

La playera lo dice todo y Tyran Stokes, el prospecto número uno indiscutido del país, lo sabe mejor que nadie.
El aura de Kobe permea en el ambiente. Si bien NY vs. NY parece una celebración de la esencia del juego, la Mamba League parece más un tributo a la responsabilidad que conlleva ser grande, a lo que significa llevar adelante un estándar similar al de Kobe.
Ese sentimiento se materializa cuando tanto los chicos como las chicas del campeonato Mamba League Invitational levantan los trofeos que Vanessa Bryant les entregó en la cancha central. Irradian alegría, se toman selfies, graban Reels, levantan los trofeos en alto. Y también hay un significado más profundo: esto va mucho más allá de los premios o los tenis.

Un año después de una cirugía mayor de rodilla,y precisamente en el cumpleaños de Kobe, el delantero cinco estrellas Jacy Abii anotó un triple impecable en el escenario mas importante.
Una verdad que se revela a través deestas plataformas de base, ya sea la intensidad de NY vs. NY, la magnitud de Peach Jam, la reverencia de Mamba League, es que las necesidades de los jóvenes atletas de hoy en día son diferentes a las de hace unos años. El juego ha evolucionado, así como todo lo que implica perseguirlo: presiones, oportunidades y exigencias.
"Necesitan apoyo a lo largo de toda su travesía", señala Conner. "No solo se trata de darles el mejor equipo para convertirlos en los mejores en la cancha. Se trata de apoyarlos con desarrollo del jugador, ayudarlos con mentorías. Podemos aprovechar a muchos de nuestros atletas [de la NBA y WNBA] que quieren ser mentores y dedicarles tiempo e invertir en ellos. Tenemos la oportunidad de darles todo lo que necesitan para triunfar en el juego".
Es por esto que ves a Chris Paul y Bradley Beal en las bancas con las polos de sus entrenadores. Y por lo que ves a Ja Morant hablando con su equipo EYBL Jr. Twelve Time después de una dura derrota. Y por lo que Nike instaló una suite de recuperación con la última tecnología en el hotel de los equipos en Augusta. No se deja ningún detalle al azar.

Cam Holmes clava un tomahawk mientras se pone el sol, rumbo al campeonato Mamba League Invitational.
"Puede que estemos en la cima, pero no hay que perder el apetito".
Karie Conner, vicepresidenta y gerente general, Básquetbol y Kobe
Y aunque Nike sigue siendo el líder mundial en la construcción de infraestructura, la ampliación de acceso y la formación de cultura, su compromiso es contrario a la complacencia. "Puede que estemos en la cima, pero no hay que perder el apetito. El futuro del juego ya está aquí y tenemos que seguir pensando en las áreas en las que podemos impulsar su crecimiento y llevarlo a la generación más joven para que crezca y participe en el juego de la forma correcta", opina Conner. "También tenemos que seguir enfocándonos en el juego femenil, para invertir, mejorar su nivel y expandirlo. En eso es en lo que estamos pensando".
En LA Live, llegó el momento de despejar la cancha. Las gradas se vacían, la gente se empieza a dispersar, los sonidos del juego se desvanecen. Del otro lado de las rejas, la estatua de bronce de Kobe brilla contra el cielo nocturno, como un recordatorio de que la grandeza nunca es cosa del pasado. El verano con Nike Básquetbol habrá terminado, pero en las palabras del gran Black Mamba, el trabajo nunca termina.

El básquetbol nunca se detiene.